9 RECOMENDACIONES A LA HORA DE ELEGIR FISIOTERAPEUTA

13.06.2017

La fisioterapia es una actividad sanitaria que actualmente está adoptando la importancia que se merece. Como ya explicamos en el post anterior, hasta hace poco, era una ciencia desconocida, la cual va creciendo a medida que se van conociendo sus beneficiosos efectos en la salud así como su evidencia científica.

¿Quién no ha ido al médico alguna vez?

¿Quién no ha visitado a la enfermera, al podólogo, al dentista o al oculista?

¿Por qué no te atreves a visitar al fisioterapeuta para tratar tu patología?

La fisioterapia está al mismo nivel que las demás actividades sanitarias y es una buena alternativa para tratar esas patologías y lesiones, las cuales nos limitan las actividades de la vida diaria.

Es además aconsejable para intentar evitar la ingesta de químicos, a veces innecesaria, que en su gran mayoría, actúan como analgésicos, pero no terminan con el problema de raíz.

Has de conocer además, que un buen tratamiento debe ser multidisplinar, es decir, no debemos "pisarnos" entre profesionales sanitarios, debemos apoyarnos y trabajar conjuntamente para evitar poner en riesgo la salud del paciente. La fisioterapia va de la mano con las demás profesiones y no es autoritaria en el ámbito de la salud.

La fisioterapia se basa en el la prevención y curación de lesiones y patologías así como el correcto mantenimiento de las funciones motoras.

Quizás elegir fisioterapeuta sea algo nuevo para ti o bien quieras cambiar de profesional por diversas circunstancias.

En este artículo, te damos diferentes pautas para el momento en el que decidas tratar tu patología.

  1. Lo primero y esencial es tener la seguridad de que estás en buenas manos. La persona que se pone frente a tu patología tiene que tener su título de grado en fisioterapia, así como su número de colegiado, el cual podrás pedir sin problemas y es una forma de asegurarte que te encuentras ante una verdadera titulación y ante un profesional que conocerá tu patología y su tratamiento.
  2. La fisioterapia es un mundo de constante crecimiento. Es interesante elegir fisioterapeutas que no hayan abandonado su formación, puesto que la tecnología y la ciencia avanza a pasos agigantados y esto se tiene que ver reflejado en el conocimiento del fisioterapeuta a la hora de aplicar nuevas técnicas o nuevos métodos que resulten beneficiosos y mejoren los anteriores.
  3. El campo de la fisioterapia es muy grande, no se basa únicamente en masajes como a veces se cree, hay formaciones específicas en multitud de ámbitos (respiratorio, cardiaco, pediátrico, suelo pélvico, etc) las cuales pueden adaptarse particularmente a tu patología.
  4. Es de vital importancia, que el fisioterapeuta realice una valoración inicial previa al tratamiento, para confirmar el diagnóstico médico e inclusive valorar compensaciones o problemas distales al foco del dolor.
  5. El problema no siempre está donde duele, lo más normal es que tu fisioterapeuta realice técnicas en zonas en las que no está instaurado el dolor, para normalizar las disfunciones que puedan ser el origen de tu patología.
  6. Muchas veces es necesario continuar el tratamiento en casa con las recomendaciones que tu fisioterapeuta te pautará; ejercicios, estiramientos, ergonomía postural, mejora de hábitos alimenticios o terapias que puedan complementar el tratamiento.
  7. Es importante que el fisioterapeuta sepa hasta dónde puede llegar con tu lesión. Hay ocasiones que es necesario derivar a compañeros que estén más especializados en el tema a tratar, o derivaciones médicas cuando el diagnóstico nos resulte extraño o apreciemos síntomas específicos (mediante observación y test funcionales) que se deban primero tratar en otros ámbitos de salud. Esto es una de las pautas importantes a valorar, si tu fisioterapeuta te deriva a otro profesional es porque realmente se preocupa por tu patología y por su recuperación y piensa que otras manos pueden adaptarse mejor a tu problema.
  8. La fisioterapia es una actividad sanitaria en la cual pones tu salud en manos de otra persona. No confiemos en precios excesivamente baratos sin antes cerciorarnos de que estamos ante un buen profesional, está en juego nuestra salud.
  9. Como en todo proceso, existen contraindicaciones a la hora de realizar un tratamiento. No dudes en contar a tu fisioterapeuta todos tus síntomas, sensaciones e incluso patologías hereditarias o personales, aunque te parezca que no tienen relación con tu dolencia, el cuerpo funciona de manera global y hay muchos síntomas que pueden estar relacionados y que como fisioterapeutas debemos conocer para realizar un buen diagnóstico.

Esperamos que este artículo os haya servido y recuerda, LA SALUD ES EL REGALO MÁS GRANDE, CUÍDALA Y PROTÉGETE!!